Industria y Emprendimiento
Turismo
Lograr que Europa siga siendo el destino ideal para el turismo
El turismo hace felices a las personas. Es un elemento clave para medir la calidad de vida y debería estar al alcance de sectores más amplios de la población. Al mismo tiempo, supone un impulso esencial para nuestra economía.
La Comisión Europea quiere potenciar el sector del turismo y repartir su volumen de negocios de manera más homogénea durante todo el año. Para lograrlo, es necesario mejorar la oferta y diversificarla. Apoyamos el desarrollo de nuevos modelos de negocio sostenibles, incluidos los productos turísticos basados en rutas históricas y culturales que traspasan las fronteras nacionales, los Destinos Europeos de Excelencia (EDEN) menos conocidos, el turismo rural y el turismo termal. Pero también fomentamos la innovación en los subsectores tradicionales, como el turismo de playa, que es, con mucho, la opción más popular entre los europeos, a pesar de su carácter sumamente estacional.
La Comisión ha puesto en marcha la iniciativa Calypso para atraer a los que tienen menos posibilidades de viajar. Pretende lograr que el turismo sea más inclusivo animando y facilitando los intercambios turísticos en temporada baja para los jóvenes, las personas con discapacidad, las familias con bajos ingresos y los ciudadanos de la tercera edad. Se trata tanto de impulsar la igualdad como de potenciar la economía. El sector del turismo presenta un enorme potencial que no se está aprovechando lo suficiente. Según nuestros cálculos, el sector turístico de la UE pierde 160.000 millones de euros al año debido a los problemas de accesibilidad de sus instalaciones, que podrían subsanarse con pequeñas inversiones.
"El turismo es la tercera industria europea en términos de volumen de negocios y emplea directa o indirectamente al 12% de la población activa de toda la UE. Debemos mantener esta importante baza y utilizar su potencial desaprovechado para crear nuevos puestos de trabajo. Al mismo tiempo, debemos logar que aumente el número de personas con acceso a los servicios turísticos, que, en mi opinión, son un excelente indicador de nuestra calidad de vida".
Hoy en día, uno de cada cuatro ciudadanos de la Unión Europea tiene entre 55 y 80 años de edad. De ellos, solo viaja el 41%, a pesar de que en la mayoría de los casos disponen de los recursos y el tiempo necesario para hacerlo. Con su iniciativa "Turismo Senior", la Comisión quiere "embarcar" a los mayores y potenciar al mismo tiempo el turismo fuera de temporada.
Nuestra estrategia se centra también en atraer el turismo de fuera de la UE. Con la mitad del mercado global, Europa es el primer destino turístico mundial. En la actualidad, las llegadas de turistas internacionales ascienden a 535 millones, de las cuales la UE recibe 401,2 millones y se espera que esta cifra aumente considerablemente en los próximos años. Estamos comprometidos a defender el liderazgo europeo en el mundo.
Pero cada vez son mayores los retos que tenemos por delante. La competencia de nuestros rivales tradicionales y de las economías emergentes es cada vez más dura. En 2012, el número de visitantes internacionales a la UE aumentó un 2,5%, mientras que en la región Asia-Pacífico este aumento fue del 6,9%, en África del 5,4% y en América del 4,6%. La UE se está quedando rezagada con respecto a otras regiones a la hora de atraer a nuevos turistas procedentes de fuera de la UE, en particular de las economías emergentes.
Para invertir esta tendencia, lo primero que hay que hacer es facilitar la entrada de turistas extranjeros en la UE. La Comisión tiene la intención de presentar, antes del fin de 2013, el Código sobre visados recientemente modificado para facilitar a los ciudadanos de los países emergentes la obtención de visados para estancias de corta duración.
Es de esperar que el hecho de contar con unos procedimientos de visado más claros y racionales suponga un incremento del número de turistas internacionales que llegan a la UE y que potencie el crecimiento económico y los intercambios culturales. Por otra parte, las modificaciones introducidas en el Código no afectarán a la seguridad, que sigue siendo la principal prioridad de la UE, por lo que los controles de seguridad se mantendrán como hasta ahora.
Lograr que Europa siga siendo el destino ideal para el turismo