Industria y Emprendimiento
Emprendimiento
Liberar el potencial empresarial europeo para reactivar el crecimiento
Para superar el problema del desempleo en la UE, además de crear más puestos de trabajo, Europa debe también crear más empresarios. Existe la opinión generalizada de que todo el mundo debe tener un trabajo, pero se admite con mucha menos frecuencia que los que buscan empleo puedan crear sus propios puestos de trabajo en lugar de ser contratados por otra persona.
Europa necesita una revolución cultural para cambiar la opinión general sobre los empresarios. Crear y dirigir una empresa debe percibirse al alcance de todo el mundo.
Esta es la realidad, pero solo unos pocos lo asumen. Solamente el 37 % de los europeos encuestados afirma que preferiría trabajar por cuenta propia en lugar de por cuenta ajena, frente al 51 % en los Estados Unidos y el 56 % en China. Además en Europa ese porcentaje está disminuyendo.
"Más emprendedores implica más empleo, más innovación y más competitividad. Convertirse en emprendedor y hacer los sueños realidad requiere mucho riesgo y esfuerzo personal. Los emprendedores son los héroes de nuestro tiempo. El espíritu emprendedor es también el más potente motor del crecimiento en la historia económica. Si somos capaces de liberar el potencial empresarial europeo, podremos reactivar el crecimiento en Europa."
Para invertir esta preocupante tendencia, la Comisión insta a los Estados miembros a incluir experiencias empresariales en sus planes de estudio obligatorios. Cambiar la mentalidad de los europeos y potenciar su disposición a la creación de empresas es el primer paso, pero este carece de sentido si el entorno empresarial sigue siendo demasiado duro, como suele ocurrir. Para la Comisión es prioritaria la simplificación burocrática, especialmente en el caso de las pequeñas y medianas empresas, pero no es suficiente. Debemos eliminar los obstáculos y apoyar también a los que más lo necesiten.
Por este motivo, estamos comprometidos activamente en ayudar a las empresas de nueva creación: la mitad de las nuevas empresas fracasan durante los cinco primeros años de vida. Queremos animar a los países de la UE a dedicar mayores recursos para ayudar a las nuevas empresas a superar ese periodo crítico, por ejemplo mediante la formación en gestión, el entrenamiento en I+D y la creación de redes con sus homólogos y los posibles proveedores y clientes.
Un acceso adecuado a la financiación es fundamental durante toda la vida de una empresa. Se están llevando a cabo varias iniciativas para eliminar los atascos que se originaron durante la crisis financiera.
Además, la Comisión Europea está convencida de la importancia de dar una segunda oportunidad a los emprendedores honrados después de una quiebra, puesto que está demostrado que el 96 % de las quiebras se deben a una serie de retrasos en los pagos u otros problemas prácticos. También se simplificarán las normas para la transferencia de propiedad de las empresas.
Se ha puesto en marcha una serie de iniciativas para ayudar a las empresas a adquirir competencias informáticas, ya que se considera que las PYME crecen de dos a tres veces más deprisa cuando utilizan las tecnologías de la información. Una mayor generalización de las competencias en TIC revierte en el interés de todos: de aquí a 2015, para el 90 % de los puestos de trabajo se necesitarán competencias informáticas.
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