por Stefan Schreck, Jefe de la Unidad de Información sobre la Salud, DG Salud y Consumidores, Comisión Europea
La salud, como la felicidad, puede ser difícil de medir. Afortunadamente, ahora podemos medir algunos aspectos de la salud pública y nuestros sistemas sanitarios con una herramienta muy útil: el informe "Panorama de la salud".
"Panorama de la salud" es un informe conjunto de la Comisión y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos que proporciona datos comparativos sobre la salud y los sistemas sanitarios de 35 países europeos.
La fecha elegida para la publicación, este mes, de la tercera edición del informe "Panorama de la salud: Europa 2014" no podía ser mejor. Coincidiendo con el inicio del mandato de la nueva Comisión, proporciona una base objetiva que permite adoptar decisiones políticas y determinar rápidamente los puntos fuertes y débiles.
Por ejemplo, la esperanza de vida ha aumentado en 5,1 años en la UE desde 1990, así que estaremos haciendo algo bien. Pero los nuevos datos también revelan nuestros fracasos: por ejemplo, uno de cada seis adultos es ahora obeso, mientras que hace una década la proporción era uno de cada ocho.
Además de poner de relieve tendencias clave como la longevidad y la obesidad y los factores determinantes de la salud que influyen en ellas, el informe examina el gasto sanitario, las desigualdades, los recursos y la calidad de la asistencia sanitaria y el acceso a la sanidad.
El capítulo sobre el gasto sanitario es particularmente revelador. Aunque estemos saliendo de la crisis económica, los presupuestos de sanidad siguen aún reduciéndose en muchos países, lo que se traduce en recortes salariales, reducción del gasto y disminución de la mano de obra. Sin embargo, a pesar de ello, el número de médicos y enfermeros per cápita ha aumentado en casi todos los países de la UE.
"Panorama de la salud" evalúa la salud pública y el funcionamiento de los sistemas de salud proporcionando cifras reales sobre una selección de indicadores basados, principalmente, en los indicadores básicos de salud de la UE desarrollados por la Comisión y los Estados miembros de la UE.
Pero al igual que con los informes médicos al término de un chequeo, no basta con saber qué problemas de salud tenemos. Hay que vigilarlos y tomar medidas para solucionarlos.
