Archive:PIB a nivel regional
- Datos de marzo de 2014. Datos más recientes: Más información de Eurostat, tablas principales y bases de datos. Actualización prevista del artículo: Junio de 2015.
Este artículo es parte de un conjunto de artículos estadísticos elaborados a partir del Eurostat Regional Yearbook. Presenta un análisis regional de los desarrollos económicos en la Unión Europea (UE). Se basa principalmente en un análisis del producto interior bruto (PIB), que se considera una de las principales medidas para estudiar el desarrollo económico y el crecimiento. También incluye información sobre la productividad de la mano de obra y la distribución de los ingresos a nivel regional.
Los datos macroeconómicos proporcionan información importante para efectuar un análisis regional de la economía. Estos datos se utilizan también para asignar los gastos en el marco de la política de cohesión de la UE (véase el apartado Cohesion policy — alignment with the Europe 2020 strategy (en inglés) en el artículo de introducción para obtener más información). De hecho, todas las regiones de la UE están cubiertas por la política de cohesión; sin embargo, la mayor parte de los fondos estructurales se destinan a las regiones NUTS 2 cuyo PIB per cápita es inferior al 75 % de la media de la Europa de los Veintiocho (la asignación de los fondos de cohesión se basa en una decisión relativa al PIB medio per cápita durante el periodo de tres años comprendido entre 2007 y 2009).
Principales resultados estadísticos
Hasta el inicio de la crisis financiera y económica, las diferencias económicas entre las regiones europeas se habían reducido, ya que las regiones «pobres» se acercaron, por lo general, a las regiones «más ricas» gracias a un proceso de convergencia. Sin embargo, la crisis financiera y económica tuvo un efecto generalizado en muchas regiones y el periodo posterior a la crisis pone de manifiesto el aumento de las disparidades, sobre todo en algunas zonas más gravemente afectadas por la crisis.
Los datos macroeconómicos regionales presentados en este artículo se muestran, por lo general, en el nivel NUTS 2 para el periodo que se extiende hasta 2011; se proporciona información sobre el PIB per cápita en el nivel NUTS 3. Los datos correspondientes a Suiza solo están disponibles a nivel nacional, mientras que los correspondientes a las cuatro regiones francesas de ultramar son estimados.
PIB regional per cápita
El PIB es una medida de la actividad económica total, ya sea de una región, un país o un grupo de países, que se utiliza ampliamente para analizar los resultados y ciclos económicos (como recesiones, recuperaciones y expansiones). El PIB se calcula inicialmente en moneda nacional y luego se convierte a paridad de poder adquisitivo (PPA) para tener en cuenta los distintos niveles de precios en los Estados miembros de la UE, lo que permite realizar una comparación más significativa. Al utilizar la PPA (en vez de los tipos de cambio del mercado), estos indicadores se convierten en una moneda común artificial denominada estándar de poder adquisitivo (EPA). El uso del EPA permite comparar el poder adquisitivo en las regiones de los Estados miembros de la UE que emplean distintas divisas y registran niveles de precios diferentes. Para obtener más información sobre el uso de los PPA, consulte la sección Fuentes y disponibilidad de datos más adelante.
El PIB medio per cápita no proporciona ninguna indicación en cuanto a la distribución de la riqueza entre los diferentes grupos de población de una misma región, ni tampoco mide los ingresos a disposición, en última instancia, de los hogares de la región, ya que los flujos de trabajadores pueden hacer que los empleados contribuyan al PIB en una región (en la que trabajan) y a las rentas de los hogares en otra región (donde viven).
Comparaciones entre el lugar de trabajo y el de residencia de las personas
Puede realizarse una comparación regional del nivel de actividad económica comparando el PIB regional con la población de la región en cuestión; aquí es donde la distinción entre el lugar de trabajo y el lugar de residencia es significativa. El PIB mide la actividad económica dentro de las fronteras nacionales o regionales, independientemente de que pueda atribuirse a trabajadores residentes o no residentes. En consecuencia el PIB regional per cápita se basa en un numerador que refleja el lugar de trabajo (el PIB producido en la región), dividido por un denominador cuyo valor refleja el lugar de residencia (población que vive en la región).Este inconveniente es particularmente relevante cuando existen importantes flujos netos de entrada o salida de trabajadores en una región. Las zonas que se caracterizan por un considerable número de trabajadores de fuera que se desplazan diariamente presentan, a menudo, un PIB regional per cápita elevadísimo (en comparación con las regiones vecinas). Este es el caso especialmente de los centros económicos como las regiones de Hamburgo (Alemania), Londres (Reino Unido), Luxemburgo, Praga (República Checa) o Viena (Austria). A causa de esta anomalía, los elevados niveles de PIB per cápita que se registran en algunas regiones con flujos de entrada netos de trabajadores no se traducen necesariamente en altos niveles de renta de las personas que viven en la misma región.
Por tanto, a veces resulta más interesante analizar medidas que se centran en la distribución de la renta de los hogares, es decir, emplear un enfoque basado en el lugar de residencia para estudiar la distribución de la riqueza. Al igual que con los datos del PIB per cápita, los valores mostrados para la renta per cápita se han ajustado para que reflejen las diferencias de nivel de precios entre países; estos datos se presentan mediante el estándar de poder adquisitivo a efectos de consumo (EPAC), una moneda artificial obtenida tras convertir la renta de los hogares con el estándar de poder adquisitivo para obtener el gasto de consumo final. No obstante, hay que tener en cuenta que estas cifras solo aportan una visión restringida del bienestar de una región, puesto que no se miden los servicios y bienes públicos que pueden ser gratis en el momento de utilización, o que pueden estar financiados parcialmente por las administraciones locales o nacionales.
El PIB de la Europa de los Veintiocho se valoró en 12 712 000 EUR en 2011, lo que se equiparaba a un nivel medio de 25 100 EPA per cápita. El mapa 1 presenta la evolución del PIB per cápita en cada región NUTS 2 como un porcentaje de la media de los Veintiocho (EU-28 = 100); las regiones con valores por encima de este nivel se consideran relativamente «ricas» y las que están por debajo, como relativamente «pobres».
En 2011, el PIB per cápita era más de 11 veces superior en Londres-Centro que en la región Noreste de Rumanía.
Entre las regiones de nivel NUTS 2, en 2011 el PIB per cápita en términos de EPA oscilaba entre el 321 % de la media de los Veintiocho en Londres-Centro y el 29 % en la región Noreste de Rumanía. Por consiguiente, el PIB per cápita de Londres-Centro fue algo más de 11 veces superior al de la región Noreste de Rumanía (tras haber tenido en cuenta las diferencias en niveles de precios). Como se ha indicado anteriormente, hay que tener cuidado a la hora de interpretar estos datos, ya que el PIB per cápita puede estar influenciado por los flujos de trabajadores y en algunas regiones, como Londres-Centro, el número de trabajadores de fuera que se desplazan aumenta la actividad económica hasta niveles muy superiores a los que puede conseguir la población residente.
Entre las diez regiones de nivel NUTS 2 que registraron los niveles más elevados de PIB per cápita se encontraban siete regiones de capitales
Entre las diez regiones de la Europa de los Veintiocho con los niveles más elevados de PIB per cápita se incluían siete regiones de capitales: Londres-Centro, Luxemburgo (una sola región en este nivel de desglose) y las regiones de las capitales de Bélgica, Eslovaquia, Francia, República Checa y Suecia. Probablemente, cada una de estas regiones presenta un nivel del PIB per cápita aumentado, como resultado de los flujos de entrada netos de trabajadores, ya que, por ejemplo, las sedes de grandes empresas y servicios financieros suelen estar agrupadas en las regiones de las capitales. Dos de las tres regiones restantes de las diez principales se caracterizaban también por ser en gran medida zonas urbanas: Hamburgo y Alta Baviera (que incluye la ciudad de Múnich, en Alemania), mientras que la tercera fue Groninga (una pequeña ciudad universitaria en los Países Bajos Septentrionales; esta región tiene dos puertos marítimos relativamente importantes, yacimientos marinos de gas y está especializada en la producción de energía y los productos químicos).
Muchas de las regiones con un PIB medio per cápita relativamente alto (como se muestra en el sombreado más oscuro del mapa 1) fueron regiones de capitales o regiones vecinas a las regiones de capitales. El resto de las regiones en las que el PIB per cápita fue al menos un 25,00 % superior a la media de la Europa de los Veintiocho se encontraba por lo general en una banda iniciada en los países de Benelux, que atravesaba Alemania, bajaba hasta Austria occidental y, posteriormente, hasta el norte de Italia. No obstante, hubo también algunas regiones aisladas con un elevado PIB per cápita, como el País Vasco (en el norte de España), la región de las islas Åland (en Finlandia), Norrland Septentrional (en Suecia) y Escocia Nororiental (Reino Unido).
Entre 2010 y 2011, la región de la capital de Austria dejó de pertenecer a las diez principales
Al comparar la clasificación regional del PIB per cápita con los datos de 2010, los únicos cambios fueron que la región de Alta Baviera entró a formar parte de las diez principales y la región de la capital austriaca de Viena dejó de estar en ese grupo (ocupando el onceavo puesto). En el otro extremo de la clasificación, la región con menor PIB per cápita en 2010 fue el Noroeste de Bulgaria, que registró el segundo nivel más bajo del PIB per cápita en el año 2011; el más bajó lo registró la región Noreste de Rumanía.
Los principales beneficiarios de los fondos de cohesión son las regiones con un PIB medio per cápita inferior al 75,00 %de la media de la UE
Las regiones que más se benefician de los fondos de cohesión presentan un PIB medio per cápita inferior al 75,00 % de la media de la Europa de los Veintiocho. Hubo un total de 76 regiones de nivel NUTS 2 dentro en esta categoría en 2011. Cabe señalar que la base para la financiación del periodo de programación 2014-2020 se ha fijado con respecto al PIB medio per cápita durante el periodo de tres años transcurrido entre 2007 y 2009. Entre estas 76 regiones, un poco más de la cuarta parte (20 regiones) registró un PIB medio per cápita inferior al 50,00 % de la media de la Europa de los Veintiocho en 2011. Estas regiones se hallaban en el este de Europa, repartidas en cuatro de los Estados miembros de la UE. Había seis regiones en Rumanía, cinco en Bulgaria, cinco en Polonia y cuatro en Hungría.
En los países de la AELC (solo hay datos nacionales de Suiza y no hay información de Liechtenstein), el PIB per cápita regional se encontraba sistemáticamente por encima de la media de la Europa de los Veintiocho, y oscilaba entre el 103 % de la media de los Veintiocho en Hedmark og Oppland y el 189 % en Oslo og Akershus (ambas en Noruega). En otras dos regiones noruegas, el PIB per cápita fue superior al 25,00 de la media de la Europa de los Veintiocho (Agder og Rogaland y Vestlandet), mientras que el PIB medio per cápita nacional de Suiza era equivalente al 155 % de la media de la Europa de los Veintiocho. En general, el PIB per cápita fue mucho menor en los países candidatos (no hay información de Montenegro ni de Serbia) y se registró un 36 % de la media de la Europa de los Veintiocho en la Antigua República Yugoslava de Macedonia; en Turquía osciló entre un mínimo del 20 % en la región sudoriental de Van, Muş, Bitlis y Hakkaria y el máximo del 80 % en Estambul.
Información sobre las regiones:
Luxembourg (LU00), Luxembourg
La región alemana de Berlín fue la única región de una capital en registrar un PIB per cápita inferior a la media nacional
La figura 1 presenta la distribución del PIB per cápita en el año 2011. Muestra que en la mayoría de los Estados miembros de la UE con varias regiones, las regiones de las capitales eran, por lo general, aquellas con el PIB medio per cápita más elevado; las únicas excepciones a esta regla son Alemania, España, Italia y Países Bajos. De estas regiones, Berlín fue la única región de una capital que registró un PIB per cápita inferior a la media nacional. En España, solo el País Vasco registró un PIB medio per cápita más elevado que la Comunidad de Madrid. En Italia, la región de la capital, Lacio, presentó el séptimo mayor PIB per cápita de las regiones NUTS 2 italianas. En los Países Bajos, Groninga y Utrecht registraron un PIB medio per cápita superior al registrado en la región de la capital de Holanda Septentrional.
Por el contrario, las regiones de las capitales de Eslovaquia, Eslovenia, Grecia, Hungría, Irlanda, Polonia, Portugal, República Checa y Rumanía fueron las únicas regiones de los Estados miembros de la UE en las que el PIB per cápita aumentó por encima de la media de la Europa de los Veintiocho en 2011. En Bulgaria, cada región, incluida la región de la capital, registró un PIB medio per cápita inferior a la media de los Veintiocho.
Suecia fue el único Estado miembro con varias regiones que registró un PIB per cápita superior a la media de la Europa de los Veintiocho en todas sus regiones
Suecia fue el único Estado miembro con varias regiones que registró un PIB medio per cápita superior a la media de la Europa de los Veintiocho en cada una de sus regiones NUTS 2 en 2011. Lo mismo ocurrió en las regiones de nivel 2 de Noruega. En Austria, Dinamarca, Finlandia e Irlanda (donde solo hay dos regiones NUTS 2) solo hubo una única región en la que el PIB medio per cápita fue inferior a la media de la Europa de los Veintiocho.
La mayoría de las regiones de Francia y Reino Unido registraron un PIB medio per cápita inferior a la media de los Veintiocho en 2011. Sin embargo, sus medias nacionales presentaron un nivel superior debido a los valores relativamente altos de cada región de la capital. Por ejemplo, el PIB medio per cápita de los barrios pobres de Londres-Centro fue 2,2 veces superior que el de Berkshire, Buckinghamshire y Oxfordshire (la región con el segundo PIB per cápita más alto del Reino Unido). Estas diferencias entre las regiones de las capitales y la región con el segundo PIB per cápita más alto se agudizaron (en términos relativos) en Eslovaquia y la República Checa: Bratislava presentó una media 2,6 veces superior a la de Eslovaquia Occidental y la de Praga fue 2,3 veces más alta que la del Sureste de la República Checa.
Un análisis regional más detallado: PIB per cápita de las regiones NUTS 3
La riqueza de las regiones de las capitales es incluso más pronunciada en un nivel más de desglose
El mapa 2 presenta información sobre el PIB per cápita para 2011 en el nivel NUTS 3 más detallado. Lógicamente, los patrones generales son similares a los mostrados en las regiones NUTS 2 del mapa 1. Sin embargo, hay varias regiones NUTS 3 en las que el PIB per cápita muestra un patrón inusual en relación con las regiones de nivel superior (NUTS 2) a las que pertenecen. Estas diferencias son a menudo el resultado de la transferencia de flujos desde zonas vecinas hacia las regiones centrales de nivel NUTS 3, caracterizadas por una concentración de la actividad económica en las zonas más urbanizadas. Por ejemplo, en las regiones NUST 2 de la capital polaca de Mazovia, la ciudad de Varsovia (Miasto Warszawa, NUTS 3) registró un PIB medio per cápita (en EPA) que era casi el doble de la media de la Europa de los Veintiocho, mientras que ninguna de las regiones NUTS 3 restantes pertenecientes a dicha región NUTS 2 registraron un nivel superior a la media de los Veintiocho.
En las regiones de nivel NUTS 3, el PIB per cápita osciló entre el 612 % de la media de la Europa de los Veintiocho en Londres-Centro — Oeste (Reino Unido) y el 21 % de la media de los Veintiocho en Vaslui (Rumanía). Por tanto, en 2011, hubo un factor de casi 30 a 1 entre los dos extremos de este intervalo (que fue ligeramente superior al del año anterior en 2010, pues el PIB per cápita aumentó a un ritmo más rápido en Londres-Centro — Oeste).
Las regiones alemanas dominaron la clasificación del PIB per cápita en las regiones NUTS 3
Hubo veintiocho regiones de nivel NUTS 3 en las que se registró un PIB medio per cápita que fue al menos el doble de la media de la Europea de los Veintiocho en 2011. Estas estaban encabezadas por Londres-Centro — Oeste (con un PIB medio per cápita 3,5 veces superior al de Londres-Centro — Este), seguida de Wolfsburg, Kreisfreie Stadt (hogar de la sede del grupo Volkswagen) donde el PIB medio per cápita fue más de cuatro veces superior a la media de la Europa de los Veintiocho. Las veintiocho regiones en las que el PIB per cápita fue por lo menos el doble de la media de la Europa de los Veintiocho se encontraban principalmente en Alemania (veintiuna de las veintiocho regiones); en la lista también se incluyen las regiones de las capitales de Bélgica, Francia, Luxemburgo (una única región en este nivel de desglose), Países Bajos y Reino Unido, así como la región francesa de Hauts-de-Seine (junto a París) y la región holandesa de Overig Groningen.
En el otro extremo, el PIB per cápita fue inferior al 30 % de la media de la Europa de los Veintiocho en veinticuatro regiones de nivel NUTS 3. Salvo la región de Nógrád al norte de Hungría, todas las demás se encuentran en Bulgaria (quince regiones) o Rumanía (ocho regiones).
Cambios en el PIB per cápita entre 2008 y 2011
Durante la crisis financiera y económica, el PIB per cápita en la Europa de los Veintiocho disminuyó de un máximo de 25 000 EPA, en el año 2008, a 23 500 EPA, en 2009. En 2010 se recuperó parcialmente y alcanzó 24 400 EPA para, a continuación, pasar a un nivel ligeramente superior al nivel máximo anterior a la crisis, con una media de 25 100 EPA en el año 2011. Las regiones que crecieron de forma relativamente rápida, es decir, cuyo PIB per cápita aumentó más de 5,0 puntos porcentuales en comparación con la media de la Europa de los Veintiocho, figuran en sombreado oscuro en el mapa 3, que muestra el grado en el que el PIB per cápita cambió entre 2008 y 2011 (expresado en relación con la media de los Veintiocho).
Las fortunas económicas nacionales parecen desempeñar un papel importante a la hora de determinar los resultados económicos a nivel regional
Es interesante observar que a pesar de las grandes variaciones en los valores medios del PIB per cápita entre las regiones de algunos de los Estados miembros de la UE, no existe un patrón relativamente uniforme en cuanto a los cambios de la actividad económica durante el periodo comprendido entre 2008 y 2011. Entre los Estados miembros de la UE con varias regiones, el PIB per cápita creció a un ritmo más rápido que la media de la Europa de los Veintiocho en todas las regiones de Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Eslovaquia, Hungría y Polonia (aparte de una región donde el PIB per cápita creció al mismo ritmo que en la UE); la mayoría de las regiones de Francia también experimentaron un crecimiento del PIB per cápita (en comparación con la media de los Veintiocho). Por el contrario, hubo una bajada sistemática del PIB per cápita (en relación con la media de la Europa de los Veintiocho) en cada una de las regiones de Croacia, Eslovenia, España, Grecia, Irlanda, Países Bajos, Portugal y Reino Unido; salvo Abruzos y Bolzano/Bozen, cada una de las regiones italianas registró también un descenso del PIB per cápita (en relación con la media de los Veintiocho).
Crecimiento económico a nivel regional más rápido en las capitales polaca y eslovaca y en la zona del suroeste de Alemania
Las tasas de crecimiento más altas del PIB per cápita entre 2008 y 2011, en comparación con la media de la Europa de los Veintiocho, se registraron en la capital de Eslovaquia y Polonia: Bratislava y Mazovia registraron aumentos de 18,9 y 17,3 puntos porcentuales. Hubo otras nueve regiones en las que el PIB per cápita creció al menos 10,0 puntos porcentuales más que la media de los Veintiocho. Ocho de estas se encontraban en Alemania (la mayor parte en la región del sur de Baviera), mientras que la región restante estaba también en Polonia (Baja Silesia), que se situaba en el suroeste del país y cuya principal ciudad es Wroclaw.
En el otro extremo de la escala, un total de 69 regiones registraron una caída en el PIB per cápita de al menos 5,0 puntos porcentuales entre 2008 y 2011 (en relación con la media de la Europa de los Veintiocho). Entre ellas, se encontraban veinte regiones que registraron reducciones de 10,0 puntos porcentuales como mínimo y que se situaban principalmente en Grecia (diez regiones) y Reino Unido (ocho regiones), aunque también se produjeron importantes contracciones en la actividad económica de Illes Balears (España) y Groninga (Países Bajos).
Productividad laboral
Dentro de las cuentas regionales, la productividad laboral se define como el valor añadido bruto en euros a precios básicos por persona empleada. El mapa 4 presenta este indicador para las regiones de nivel NUTS 2 en el año 2011 con los resultados mostrados en relación con la media de la Europa de los Veintiocho. Si hay importantes corrientes de trabajadores entre las regiones, es probable que las regiones caracterizadas por tener flujos de entrada netos de trabajadores muestren cifras inferiores del valor añadido bruto por persona empleada que los correspondientes porcentajes del PIB per cápita; en otras palabras, es probable que la diferencia entre las regiones se vea reducida al analizar la productividad laboral. Lo ideal sería que las medidas de productividad regional tuvieran en cuenta el número total de horas trabajadas (en lugar de un simple recuento de las personas empleadas); sin embargo, esta medida aún no se ha aplicado en varios Estados miembros de la UE.
Los centros financieros registran algunos de los datos de mayor productividad laboral
El nivel más alto de valor añadido bruto por persona empleada en el año 2011 se registró en Londres-Centro (la misma región que registró el mayor PIB per cápita). Los niveles relativamente altos de productividad laboral pueden estar relacionados con el uso eficiente de la mano de obra (sin usar más contribuciones) o pueden ser el resultado de la combinación de las actividades que conforman una economía determinada (puesto que algunas actividades tienen niveles de productividad más altos que otras). Por ejemplo, el sector de los servicios financieros desempeña un papel especialmente importante en la economía de Londres y esta actividad se caracteriza por tener niveles de productividad particularmente elevados. Luxemburgo (una región en este nivel de desglose) y la parte meridional y oriental de Irlanda (que incluye a Dublín) –ambas especializadas en servicios financieros–, también se incluyeron entre las diez regiones con una mayor productividad laboral. El resto de estas diez regiones estaba constituido por cuatro regiones holandesas (que incluían la región de la capital de Holanda Septentrional y la región más competitiva de la Unión Europea –Utrecht– junto con Groninga y Zelanda), así como por las regiones de las capitales de Isla de Francia, Bruselas-Capital y Estocolmo.
La productividad laboral es inferior en aquellos Estados miembros que se incorporaron a la UE en el 2004 o después
No había una sola región de los Estados miembros que se incorporaron a la UE en el 2004 o después cuyo nivel de valor añadido bruto por persona empleada fuese superior a la media de la Europa de los Veintiocho. Chipre (una región en este nivel de desglose) y las dos regiones de las capitales Bratislava y Praga presentaron los niveles más altos de valor añadido bruto por persona empleada entre las regiones de nivel NUTS 2 de estos trece Estados miembros, con cerca del 80 % de la media de la Europa de los Veintiocho en 2011.
Hubo 45 regiones de nivel NUTS 2 en las que el valor añadido por persona empleada fue inferior a la mitad de la media de la Europa de los Veintiocho en 2011. Estos se repartieron principalmente por Europa oriental y septentrional, con la excepción de la región Centro de Portugal. Cada región de Bulgaria y Hungría, los tres Estados miembros bálticos (cada uno conforma una única región en este nivel de desglose), todas las regiones de Polonia y Rumanía, salvo la región de la capital de Mazovia y Bucarest-Ilfov, cuatro regiones de la República Checa y dos regiones de Eslovaquia registraron una productividad laboral inferior al 50 % de la media de la Europa de los Veintiocho (como se muestra con el sombreado más claro del mapa 4).
Renta primaria de los hogares
En los últimos años se ha producido un creciente debate sobre la calidad de vida en Europa y un gran número de personas opinan que, en general, sus condiciones de vida han empeorado desde el comienzo de la crisis financiera y económica, sobre todo como resultado de la bajada de los salarios reales, el aumento del desempleo, las cargas adicionales de impuestos o cargas sociales, los niveles más bajos de beneficios o la rápida subida de los precios (por ejemplo, para los productos relacionados con la energía).
El mapa 5 proporciona una descripción general de las rentas primarias per cápita en las regiones de nivel NUTS 2 de veintiséis Estados miembros de la UE; no hay datos disponibles para Croacia ni Malta. En el año 2011, la renta primaria osciló entre un máximo de 32 600 EPAC per cápita en Londres-Centro (Reino Unido) hasta un mínimo de 3 200 EPAC en la región Noreste de Rumanía, un factor de 10,2 a 1; por lo tanto, los valores más altos y más bajos se registraron en las mismas regiones que presentaron el nivel más alto y más bajo de PIB per cápita.
Altos niveles de renta primaria en el sur de Alemania y, más en general, en las ciudades capitales y alrededores
Hubo trece regiones que registraron una renta primaria per cápita de al menos 25 000 EPAC en 2011. La mayoría (ocho) de estas trece regiones estaban en Alemania, incluida la segunda cifra más alta que se registró en Alta Baviera (la única región que presentó una renta primaria per cápita superior a los 30 000 EPAC). Las otras siete regiones alemanas se encontraban principalmente en el sur del país, a excepción de Hamburgo. Aparte de Londres-Centro, las cuatro regiones restantes no alemanas que registraron una renta primaria per cápita de al menos 25 000 EPAC fueron las dos regiones que rodean la capital belga (Brabante Flamenco y Brabante Valón) y las regiones de las capitales Isla de Francia (que presentó el tercer mayor nivel de renta primaria per cápita) y Luxemburgo (una región en este nivel de desglose). Al igual que con la información ya mostrada para el PIB per cápita, una de las características más llamativas del mapa 5 es el nivel relativamente alto de renta primaria per cápita registrado en las regiones que incluían o circundaban capitales.
En el otro extremo de la escala, había 40 regiones de nivel NUTS 2 que comunicaron una renta primaria per cápita inferior a 10 000 EPAC (los últimos datos de la región de ultramar francesa Guayana son de 2009). Las regiones de Bulgaria y Rumanía constituyeron nueve de las diez regiones con los niveles más bajos de renta primaria per cápita en la UE en 2011; la otra región fue Letonia (una sola región en este nivel de desglose). Las restantes 30 regiones con rentas primarias per cápita inferiores a 10 000 EPAC incluyeron los otros dos Estados miembros del Báltico (ambos con una sola región), más las regiones de Bulgaria y Rumanía, así como varias regiones de Hungría y Polonia y una única región de Eslovaquia. Hubo también dos regiones de Grecia y dos de Portugal, ya que los efectos de la crisis financiera y económica redujeron considerablemente los ingresos en esos países.
Renta disponible
La figura 2 facilita información sobre la renta disponible de los hogares, en otras palabras, los ingresos efectivos que las personas pueden gastar o ahorrar (tras haber pagado los impuestos y las cotizaciones a la seguridad social y haber recibido las prestaciones sociales). El mayor nivel de renta disponible per cápita en el año 2011 se registró en Luxemburgo (una única región en este nivel de desglose), con 23 800 EPAC. Este estaba ligeramente por encima de los niveles registrados en Alta Baviera (Alemania) y Londres-Centro (Reino Unido); estas tres regiones fueron las únicas en toda la UE que registraron una renta disponible per cápita de más de 23 000 EPAC en 2011.
Luxemburgo registró el mayor nivel de renta disponible en 2011
El nivel más alto de renta disponible per cápita en Luxemburgo fue 5,5 veces superior que el de la región Noreste de Rumanía (4 300 EPAC); si se compara con la misma relación obtenida para la renta primaria, las desigualdades se reducen casi a la mitad, ya que la diferencia entre las regiones con los niveles mayores y menores de renta primaria per cápita presentó una relación de 10,2 a 1. De hecho, la renta disponible per cápita en la mayoría de las regiones es generalmente inferior a la cifra correspondiente para la renta primaria per cápita, como consecuencia de la intervención del Estado (redistribución). Esto es especialmente evidente en las regiones caracterizadas por tener los salarios más altos (a menudo las regiones de las capitales), ya que los impuestos y las cotizaciones a la seguridad social suelen aumentar en función de los ingresos.
La figura 2 muestra que las regiones de las capitales suelen contar con los niveles más altos de renta disponible, aunque este patrón fue menos evidente entre los Estados miembros de la UE con los mayores niveles de renta disponible. En Alemania y Bélgica, la renta disponible per cápita en la región de la capital se encontraba por debajo de la media nacional; mientras que en Austria era similar a la media nacional. Las regiones de las capitales de España, Finlandia, Italia y Países Bajos registraron una renta disponible per cápita superior a sus respectivas medias nacionales, aunque hubo al menos otra región en cada uno de estos países que presentó un nivel mayor de renta disponible per cápita.
Aparte de las regiones de las capitales, se produjo una distribución relativamente uniforme de la renta disponible en las regiones de la mayoría de los Estados miembros de la UE
Aparte de las regiones de las capitales, la distribución de la renta disponible per cápita estuvo por lo general dentro de un margen relativamente estrecho en todas las regiones del mismo Estado miembro de la UE. Este hecho fue particularmente evidente en Austria y en los Estados miembros nórdicos, que mostraron distribuciones bastante uniformes. Por el contrario, y sin contar una vez más las regiones de las capitales, las mayores variaciones de renta disponible per cápita entre las distintas regiones de un mismo Estado miembro de la UE se registraron en Francia e Italia; en Francia, este hecho se debió, al menos en parte, a los valores relativamente bajos de las regiones de ultramar y en Italia, a una considerable brecha en los ingresos entre el norte y el sur del país.
Una comparación entre la renta primaria y la renta disponible muestra la influencia niveladora que puede tener, por lo general, la intervención del Estado, con la convergencia de la renta disponible per cápita entre regiones «ricas» y «pobres». Por ejemplo, en Bélgica los habitantes de la región relativamente rica de Brabante Flamenco vieron como su renta primaria per cápita se redujo 7 100 EPAC, mientras que los habitantes de Henao (un antiguo centro industrial especializado en minería de carbón y producción de hierro y de acero) experimentó una reducción media de su renta primaria de 1 900 EPAC. De manera similar, se produjo una transferencia de ingresos desde las regiones del norte a las regiones del sur de Italia; dichas transferencias también se dieron hacia zonas predominantemente rurales del centro y oeste de España, hacia viejas zonas industriales del Reino Unido y hacia las regiones orientales de Alemania, Hungría y Polonia.
Aunque en la mayor parte de las regiones de nivel NUTS 2 la renta disponible per cápita era inferior a la renta primaria per cápita, 51 regiones se beneficiaron de prestaciones sociales y otras transferencias en tal grado que su renta disponible per cápita fue superior que su renta primaria. Dicha situación se produjo en las trece regiones, excepto una, de Grecia (la excepción fue Egeo Meridional), en siete regiones del Reino Unido, seis de Polonia, cinco de Bulgaria, de Portugal y de Rumanía, cuatro de Hungría, dos de Alemania y una de Eslovaquia, de España, de Francia, de Irlanda y de Italia.
Información sobre las regiones:
Mazowieckie (PL12), Poland
Los mayores incrementos de la renta disponible se registraron en Alemania y Polonia
El mapa 6 muestra el cambio de la renta disponible per cápita en las regiones de nivel NUTS 2 entre 2008 y 2011; cabe señalar que no se dispone de información para Chipre, Croacia, Malta y las regiones francesas de ultramar. El patrón más evidente en el mapa es el aumento relativamente alto de la renta disponible en Alemania y Polonia, dos de los Estados miembros de la UE menos afectados por la crisis económica y financiera. El mayor nivel de aumento de la renta disponible en las regiones de nivel NUTS 2, según los datos disponibles, se registró en la región de la capital polaca, Mazovia.
Aparte de las regiones polacas y alemanas, las otras regiones en las que la renta disponible aumentó al menos 1 500 EPAC per cápita entre 2008 y 2011 (como se muestra en la sombra más oscura) fueron el Sureste de Bulgaria y las regiones de las capitales de Eslovaquia, Hungría y Finlandia.
La renta disponible se redujo más de 1 000 EPAC en todas las regiones griegas, menos en una
En 29 regiones de la Europa de los Veintiocho la renta disponible per cápita se redujo en más de 1 000 EPAC entre 2008 y 2011 (como se muestra por la sombra clara del mapa 6). Las mayores reducciones en renta disponible se experimentaron en algunos de los Estados miembros de la UE más afectados por la crisis financiera y económica: casi todas las regiones griegas (Egeo Meridional fue la única excepción); Reino Unido (ocho regiones, incluido tanto Londres-Centro como Londres-Periferia), España (cuatro regiones) y las regiones de las capitales de Irlanda y Rumanía.
Fuentes y disponibilidad de datos
El Sistema Europeo de Cuentas Nacionales y Regionales (SEC) establece la metodología de las cuentas regionales en la UE. El SEC 95 es plenamente coherente con las directrices internacionales relativas a la contabilidad nacional, el Sistema de Cuentas Nacionales de 1993 (SCN 1993). Tras el acuerdo internacional sobre una versión actualizada del SCN en 2008, el SEC también fue objeto de revisión. Estas revisiones se reflejan en un Reglamento del Parlamento Europeo y el Consejo relativo al Sistema Europeo de Cuentas Nacionales y Regionales de la Unión Europea (Nº 549/2013). En la página web de Eurostat (en inglés) se puede encontrar más información sobre la transición de SEC 95 a SEC 2010.
Definiciones de los indicadores
El producto interior bruto (PIB) es la medida básica de las cuentas nacionales y resume la posición económica de un país o región. Puede calcularse utilizando distintos enfoques: el enfoque de producción; el enfoque de gasto; y el enfoque de ingresos. No obstante, a escala regional, el enfoque de gastos no puede utilizarse, puesto que exigiría la medición de exportaciones e importaciones regionales, lo que no es posible en los Estados miembros de la UE.
La renta primaria de los hogares es aquella generada directamente por las transiciones de mercado. Incluye, por lo general, los ingresos por el trabajo remunerado y el trabajo por cuenta propia, así como ingresos en forma de intereses, dividendos y rentas. Los intereses y las rentas pagaderos se registran como elementos negativos.
La renta disponible se deriva de la renta primaria añadiendo todas las prestaciones sociales y transferencias monetarias (redistribución por el Estado) y deduciendo los impuestos sobre la renta y el patrimonio, así como las cotizaciones sociales y transferencias similares (como tal, refleja los ingresos efectivos).
Paridades de poder adquisitivo
El PIB regional se calcula en la moneda local de la región en cuestión (y, por tanto, del país). El PIB se puede convertir a una moneda común para poderlo comparar de forma más sencilla (p. ej., a euros o dólares).
Los tipos de cambio reflejan muchos factores relacionados con la oferta y la demanda en los mercados de divisas, como el comercio internacional, las previsiones de inflación y los diferenciales de tipo de interés. Sin embargo, los tipos de cambio no reflejan todas las diferencias en los niveles de precios entre países. Para compensar este fenómeno, el PIB se puede convertir utilizando unos factores de conversión conocidos como «paridades de poder adquisitivo» (PPA) a una moneda común artificial, denominada estándar de poder adquisitivo (EPA). De este modo, se puede comparar el poder adquisitivo de las distintas monedas nacionales. Incluso dentro de una unión monetaria como la zona del euro, una moneda única sigue mostrando diferentes poderes adquisitivos en función de los países y de los niveles de precios nacionales.
En términos generales, el uso de series de EPA en vez de series basadas en el euro tiende a tener un efecto de nivelación, ya que las regiones con un PIB per cápita muy alto en euros suelen presentar niveles de precios relativamente altos (por ejemplo, el coste de la vida en el centro de París o de Londres es generalmente más elevado que en las zonas rurales de la UE). Los cálculos del PIB per cápita basados en series EPA en lugar de en series en euros pueden dar lugar a diferencias considerables en la clasificación de las regiones.
Contexto
Medición del desarrollo económico
El desarrollo económico se expresa generalmente en términos de PIB, que en el contexto regional puede utilizarse para medir la actividad macroeconómica y el crecimiento, así como para sentar las bases para las comparaciones entre regiones. El PIB es también un indicador importante desde el punto de vista político ya que resulta fundamental para determinar la medida en que cada Estado miembro de la UE debe contribuir al presupuesto de la UE, mientras que las medias trienales del PIB se utilizan para decidir qué regiones pueden recibir apoyo de los fondos estructurales de la UE.
El PIB per cápita se considera a menudo un indicador del nivel de vida. Sin embargo, no debe confiarse en él como única fuente de información para utilizarlo en debates políticos generales ya que, por ejemplo, no mide la sostenibilidad medioambiental ni la integración social, que se consideran cada vez más importantes impulsores de la calidad de vida.
Varias iniciativas internacionales se han centrado en esta cuestión y en agosto de 2009, la Comisión Europea adoptó una Comunicación denominada «Más allá del PIB: evaluación del progreso en un mundo cambiante» (COM(2009) 433 final), en la que se indicaban una serie de acciones para mejorar y complementar las mediciones del PIB. Se señalaba la clara necesidad de completar el PIB con estadísticas que cubriesen otros aspectos económicos, sociales y medioambientales de los que depende sobremanera el bienestar de las personas. Las recientes evoluciones de estos indicadores complementarios se detallan en un documento de trabajo titulado «Progress on ‘GDP and beyond’ actions» (SWD(2013) 303 final) (en inglés), donde se confirma el interés público en medidas más amplias del PIB, a nivel regional y local.
Políticas económicas
Como se señaló en el artículo de introducción, la política regional de la UE está diseñada para fomentar la solidaridad y la cohesión, de forma que cada región realice todo su potencial, mediante la mejora de la competitividad y el empleo y la elevación de los niveles de vida de las regiones más desfavorecidas hacia la consecución de la media de la UE lo más rápidamente posible.
Las desigualdades regionales pueden deberse a muchos factores, como: lejanía geográfica o población dispersa, cambio económico y social o el legado de los anteriores sistemas económicos. Estas desigualdades pueden apreciarse, por ejemplo, en las carencias sociales, las deficiencias en la educación y la atención sanitaria, un desempleo más elevado o unas infraestructuras inadecuadas.
La política regional de la UE está encaminada a apoyar el programa de trabajo de Europa basado en promover el crecimiento sostenible y la creación de empleo. De hecho, la financiación regional está invirtiendo en todas las regiones de la UE, en consonancia con los objetivos Europa 2020. Se hace gran hincapié en el apoyo a una gran variedad de iniciativas diseñadas para impulsar el rendimiento económico, por ejemplo: innovación e investigación, desarrollo sostenible y creación de un entorno propicio para la creación de pequeñas empresas.
Más de un tercio del presupuesto de la UE se dedica a la política de cohesión, cuyo objetivo es eliminar las disparidades económicas, sociales y territoriales en la UE, mediante, por ejemplo, ayudas para reestructurar las zonas industriales en declive o para diversificar las zonas rurales. De este modo, la política regional de la UE pretende que las regiones sean más competitivas gracias al fomento del crecimiento económico y a la creación de nuevos puestos de trabajo. La política regional de la UE es una política de inversión que apoya la creación de empleo, la competitividad, el crecimiento económico, el aumento de la calidad de vida y el desarrollo sostenible. Estas inversiones respaldan los objetivos de la estrategia Europa 2020, mientras que la política regional expresa además la solidaridad de la UE con los países y las regiones menos desarrollados, ya que los fondos se destinan a países, regiones y sectores económicos donde pueden lograr el mayor cambio.
Para el periodo 2014–2020, la política de cohesión de la UE se ha reorientado con el objetivo de lograr el máximo impacto en el crecimiento y el empleo. Durante el periodo 2014-2020, la UE invertirá un total de 351 000 EUR en las regiones de Europa. Las inversiones seguirán extendiéndose a todas las regiones, pero las reformas en materia de política se han adoptado modificando los niveles de apoyo en función de las nuevas clasificaciones regionales:
- regiones menos desarrolladas (PIB > 75 % de la media de la EU-27);
- regiones en transición (PIB 75 % – 90 % de la media de la EU-27); y
- regiones más desarrolladas (PIB > 90 % de la media de la EU-27).
La política regional de la UE pretende contribuir a que cada región realice todo su potencial, mediante la mejora de la competitividad y la elevación de los niveles de vida de las regiones más desfavorecidas hacia la consecución de la media europea (convergencia). La política económica regional se propone estimular la inversión en las regiones mediante la mejora de la accesibilidad, la provisión de servicios de calidad y la conservación del medio ambiente, promoviendo así la innovación y la iniciativa empresarial, además de la creación de empleo, y superando las desigualdades que puedan apreciarse en las carencias sociales, las deficiencias en la vivienda, la educación y la atención sanitaria, un desempleo más elevado, o unas infraestructuras inadecuadas.
Véase también
- Cuentas nacionales y PIB
- Economy and finance introduced (en inglés)
- European sector accounts - backgrounds (background article) (en inglés)
- GDP per capita, consumption per capita and price level indices (en inglés)
- Update of the SNA 1993 and revision of ESA95 (background article) (en inglés)
Más información de Eurostat
Publicaciones
- Eurostat regional yearbook 2013 — Capítulo 1 (en inglés)
- Eurostat regional yearbook 2012 — Capítulo 1 (en inglés)
- Eurostat regional yearbook 2011 — Capítulo 7 (en inglés)
- Convergence and disparities in regional Gross Domestic Product — Statistics in focus 46/2011 (en inglés)
Tablas principales
- Regional statistics (t_reg), véase (en inglés):
- Regional economic accounts - ESA95 (t_reg_eco)
- Annual national accounts (t_nama), véase (en inglés):
- Regional economic accounts - ESA95 (t_nama_reg)
Base de datos
- Regional statistics (reg), véase (en inglés):
- Regional economic accounts - ESA95 (reg_eco)
- Annual national accounts (nama), véase (en inglés):
- Regional economic accounts - ESA95 (nama_reg)
Sección especializada
- National accounts (en inglés)
- Regional statistics (en inglés)
Metodología / Metadatos
- Gross domestic product (GDP) at current market prices (ESMS metadata file — nama_r_e2gdp_esms) (en inglés)
Fuente de los datos de los gráficos y los mapas (MS Excel)
- Economy at regional level (en inglés)
Enlaces externos
- European Commission — Regional Policy — Inforegio: GDP and other measures of the regional economy (archivo) (en inglés)