Querría en estas líneas comentar una serie de problemas que se nos plantean a los usuarios de Systran(*), problemas que pueden tener repercusiones de carácter más general aplicables a la estilística del español y a la teoría de la traducción. Vaya por delante, antes que nada, mi más sincera felicitación al equipo de Systran por la notable calidad de las traducciones que nos viene ofreciendo desde hace ya algún tiempo.
Soy de la opinión de que toda nueva herramienta de trabajo que se revele útil y eficaz plantea nuevos problemas que corresponde al factor humano solucionar. Liberados, pues, gracias a Systran, de la pesadez de la mecanografía o del dictado, corremos sin embargo el peligro de convertirnos en víctimas del éxito del invento. Quiero decir que la calidad de Systran es tal que ya podemos dar perfectamente por buenas muchas de las traducciones que nos ofrece, sobre todo en el par francés-español, todo lo más con algún que otro imprescindible retoque. Y haremos bien, porque de eso se trata si queremos ganar en velocidad y hacer frente a los plazos cada vez más apurados y a la siempre ingente carga de trabajo.
Ahora bien, ¿se puede mejorar una traducción de Systran? Y en general ¿cómo mejorar algo que ya está en perfecto español? ¿Qué necesidad hay de ello? Yo diría que no hay por qué, que las actitudes quisquillosas son más un rasgo de carácter que una muestra de una verdadera preocupación por la lengua. Pero que lo mismo ocurre con ese exceso de indulgencia o indolencia tan fatídico como común. De modo que, para no hablar en el vacío, permitidme que pase a comentar una cuestión, a mi modo de ver crucial, que se da en las traducciones de Systran y en el español comunitario en general.
Observad las frases siguientes:
Ambas son perfectamente correctas y aceptables y constituyen la traducción exacta de lo siguiente:
La primera versión es de Systran. Yo prefiero la segunda. ¿En qué se diferencian? En el orden de los sintagmas y en que, en mi opinión, la segunda se lee con mayor facilidad y se entiende mejor. ¿Por qué? Bien, Systran roza la perfección morfológica y terminológica en la traducción de los elementos constitutivos de un mismo sintagma, pero falla en la reorganización de esos mismos sintagmas dentro de la frase, y es difícil que no sea así.
Esta frase se compone pues de los siguientes elementos:
Pues bien, si en principio el orden sintáctico Sujeto - Verbo - Objeto Directo - Objeto Indirecto - Complementos Adverbiales puede parecer el más lógico en español, no siempre es el habitual ni siquiera el más natural ni el más comprensible.
Conclusiones
En definitiva: podríamos perfectamente dar por buena la primera traducción de Systran, pero unos simples "recorta y pega" harían su lectura mucho más placentera. ¿Qué le queda si no al buen traductor? Es cierto que este problema es el pan cotidiano de nuestro oficio, pero la intrínseca literalidad de las traducciones de Systran no hace sino acrecentarlo. Convendría pues estar atentos a ello "pour faire encore mieux".
César Montoliu
Comisión Europea
"cesar.montoliu
garcia"@ec.europa.eu
(*) Cabe señalar para los legos en la materia que Systran es el sistema de traducción automática empleado y mejorado en la Comisión Europea.