Uno de los sucesos afectó a los municipios extremeños de Cabezuela del Valle, Piornal, Garganta la Olla y Aldeanueva de la Vera. Durante la misma tarde se produjo un incendio cerca de los pueblos de Cueva de la Mora y Monte Blanco en torno a Patrás en Andalucía, lo que condujo a la evacuación de más de 200 personas. El incendio forestal de Cáceres amenazó un bosque de gran valor ecológico, incluidos los espacios naturales protegidos de la Red Natura 2000.

A las pocas horas del inicio de las activaciones, se facilitaron a las autoridades las primeras estimaciones del impacto. Durante los días siguientes, y hasta que se extinguieron todos los focos activos, se realizó un seguimiento diario de los dos incendios mediante el análisis de imágenes ópticas de satélite de muy alta resolución. Las imágenes se utilizaron para determinar el perímetro de la zona quemada y evaluar el nivel de los daños. En 2020, España solicitó nueve veces los servicios del SGEC.