Este mismo mes, la Conferencia Ministerial Europea de la OMS sobre “Sistemas Sanitarios, Salud y Prosperidad” reunirá en Tallin (Estonia) a los 53 Estados pertenecientes a la región europea de la Organización. En septiembre de 2005, los diversos países pidieron a la OMS/Europa que organizara la Conferencia con objeto de responder mejor a los retos sanitarios, existentes y emergentes, a través de los sistemas sanitarios. Desde entonces se ha recorrido un largo camino. La labor ha sido ardua y la colaboración intensa, con cinco reuniones preparatorias y un comité consultivo exterior que orientaba el trabajo de la Oficina Regional para Europa de la OMS. Pero este ingente esfuerzo consultivo ha demostrado que interesados y responsables pueden unir sus fuerzas para crear una estrategia europea destinada a consolidar los sistemas sanitarios nacionales. Para ello también hay que presentar a los responsables políticos nuevas pruebas de la importancia esencial de los sistemas sanitarios a la hora de mejorar la salud y la prosperidad de las sociedades. Durante la conferencia, los Estados miembros europeos de la OMS debatirán, y es de esperar que firmen, la Carta de Tallinn: sistemas sanitarios por la salud y la prosperidad. La Carta otorgará a los sistemas sanitarios y la salud un lugar preferente en la agenda política de los Gobiernos y definirá explícitamente el compromiso político de los Estados miembros y la función de los colaboradores para garantizar que el funcionamiento de los sistemas sanitarios europeos contribuya a mejorar la salud y la prosperidad de los ciudadanos.
La Comisión Europea ha colaborado activamente con la OMS/Europa en todo el proceso. Ambas organizaciones son aliadas por naturaleza, ya que comparten sus propios componentes: los 27 Estados miembros comunes y los siete países candidatos o candidatos potenciales a la adhesión, cuatro miembros del EEE/AELC y siete países acogidos a la Política de Vecindad de la UE. Además, la UE y la OMS coinciden en unos valores comunes que sostienen y dirigen la eficacia de los sistemas sanitarios, y en la preocupación por que los procesos políticos europeos tengan siempre presentes los problemas de los sistemas sanitarios, ya que son un factor esencial de la salud. Los ministros de sanidad tienen que influir para que los demás sectores y políticas integren las cuestiones sanitarias. Estas ideas comunes quedaron reflejadas en la Estrategia Sanitaria de la UE 2008-2013.
La OMS/Europa ha realizado un esfuerzo a escala europea de cooperación con los Estados miembros, los colaboradores y los especialistas para cumplir su misión de ayudar a los países a consolidar sus sistemas sanitarios. Nuestros colaboradores de la CE han puesto toda la carne en el asador, y ello se apreciará claramente en Tallinn. Me será muy grato acoger al Comisario de Sanidad de la UE para pronunciar el discurso inaugural. Muchos especialistas de la DG SANCO y otros servicios de la CE participarán en diversas sesiones, y una transmisión por satélite de la CE dará a conocer su labor sobre algunos aspectos de la consolidación de los sistemas sanitarios.
Creo que juntos podremos dar una respuesta a las cuestiones más acuciantes en lo que respecta a la relación dinámica entre sistemas sanitarios, salud y prosperidad.