La probabilidad de producir una respuesta significativamente superior a la
media a una exposición específica a una sustancia.
Más:
La susceptibilidad puede subdividirse en dos tipos, la innata y la adquirida.
La susceptibilidad innata puede deberse a una predisposición
genética o a un desarrollo incompleto de las funciones psicológicas normales (de
un adulto). Un niño puede ser susceptible a una sustancia determinada debido a
que los procesos de desintoxicación no se han desarrollado por completo. Dicha
susceptibilidad es transitoria y desaparece con la edad y el crecimiento.
La susceptibilidad adquirida puede deberse a una enfermedad, al estado socioeconómico o a la edad.